domingo, 1 de agosto de 2010

El sueño colombiano....

Este post es un pequeño reflejo de lo que a mi juicio, es una pequeña parte de la sociedad colombiana, por supuesto muchos de los rasgos aquí descritos, no son propiamente de nuestro país y seguramente usted siendo de otra nacionalidad pueda sentirse identificado por los comportamientos aquí descritos. Antes de comenzar, reitero, es una pequeña parte de la sociedad por lo que suponga que no estoy generalizando y creo firmemente en ésta tierra y su gente.


La sociedad colombiana, por sí misma es una cultura con tendencia al "facilismo", la mayoría siempre elige el camino del menor esfuerzo y con frecuencia opta por los atajos para lograr sus metas... aunque algunas veces éstos atajos sean moralmente e incluso legalmente reprochables.

Veo con tristeza, cómo nuestro más grande instructor (si, estoy hablando de la televisión) poco aporta a un país desorientado y que sólo promueve ése mismo "facilismo" en el que delincuentes y traficantes en novelas de "Prime Time" la pasan bueno.... y si los matan al menos se la gozaron.

Me aterra más aún, como se aplaude y se alaba, a los que haciendo gala de su "astucia" lograron cosas impensables y reciben mucho más reconocimiento que doctores, científicos entre otras personas pensantes que casi desde el anonimato hacen las cosas que realmente hace que éste país todavía funcione.

¿Quién no añora un vehículo último modelo? ¿O un apartamente lujoso? ¡Todos! ¿verdad? y está bien pero, el prototipo de hombre que los posee, según nuestra televisión, es un delicuente de buena vida que de paso ¡tiene una mujeres hermosas al lado!

Esta televisión que aproveché para criticar hoy, no es gratis... también es fruto de una sociedad en caída libre, cada vez con menos valores y cuya estructura mínima fundamental, la familia, se encuentra cada vez más fragmentada y aislada.

La televisión finalmente sólo trasmite "lo que a la gente le gusta" (como reflejo de la misma sociedad) por aquello del rating y "nos encantan" las series en las que por algún motivo nos sentimos identificados.

Por eso muchos de los colombianos sólo viven para quejarse del gobierno, convencidos que es él quien debe darles el pan en la boca, cuando en realidad el ejercicio del gobierno es garantizar las oportunidades (por supuesto también influye y tiene deficiencias el Estado, pero ese no es el tema de éste post). Por eso pocos colombianos realmente estudian por convicción seguros de sí mismos y de su capacidad de progresar... y por eso pocos colombianos ven el trabajo con gusto, por el contrario, es una "pesada carga" que deben llevar a cuestas a diario.

Todos esperamos un golpe de suerte, ganarnos la lotería, una rifa, encontrarnos algo en el bus, ¡lo que sea! que nos de una mano y "solucione" mágicamente todos nuestros problemas, pero difícilmente pensamos en proyectarnos a futuro, a realizarnos como profesionales y por supuesto como personas.

Convencido que "los buenos somos más", hago el llamado de atención a los sectores académicos del país, a profesionales y gobernantes... para, desde sus respectivas áreas incentivar una cultura de proyección... a invitar a las personas a hacer las cosas más por gusto que por obligación y por supuesto, para poco a poco borrar de nuestras mentes "la cultura del atajo", ésa que se traspone con el "emprendimiento del colombiano" y que poco a poco a venido corroyendo y fragmentando nuestra sociedad.

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Imagen Cortesía de Ariovisto
http://ariovisto.wordpress.com/2010/01/22/suenas-que-sonaste-un-sueno/

3 comentarios:

  1. Waoooooooo muy buen punto de vista amigo diego, saludos desde peru-aqp...

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  2. Pues no todos codiciamos un auto último modelo o un apartamento XD. Pero lo que si concuerdo contigo es que la sociedad en este país ama la cultura del atajo y del vivo. Yo creo que tal cultura viene del mismo Estado, pues tal asistencialismo hace creer al ciudadano que necesita del Estado, que necesita de aquellos gobernantes que les prometen puentes, casas y dinero en sus bolsillos, haciendo que el ciudadano no le preste atención a aquellos que les ofrecen educación, autonomía, soberanía, control sobre los medios de producción, etc. Para mí, es un juego entre oligarquía y pueblo, siendo este último, hasta el momento, el perdedor; es el lobo que lambe la sangre del mismo cuchillo que lo está desangrando. Saludos desde esta patria, aún, boba.

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  3. @cybernautape @kaleemsagard ¡Muchisimas gracias por sus comentarios! Me siento muy honrado de contar con sus aportes :)

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